"El hábito de pensar por medio de comparaciones es fatal. Cuando ocurre algo agradable, hay que disfrutarlo plenamente, sin pararse a pensar que no es tan grande como alguna otra cosa que le puede ocurrir a algún otro. 'Sí' dirá el envidioso, 'hace un día espléndido y es primavera y los pájaros cantan y las flores se abren, pero tengo entendido que la primavera en Sicilia es mil veces más bella, que los pájaros cantan mil veces mejor en las arboledas del Helicón y que las rosas de Sharon son mucho más bonitas que las de mi jardín'. (...) Todas estas comparaciones son absurdas y tontas. (...) En realidad, la envidia es un tipo de vicio en parte moral y en parte intelectual, que consiste en no ver las cosas tal como son, sino en relación con otras".
domingo, 27 de agosto de 2023
sábado, 8 de abril de 2023
Fragmento de "Remedios para la vida" de Francesco Petrarca
RAZÓN: "Si la abundancia de libros pudiese hacer a los hombres sabios y buenos, entonces los más ricos serían los más letrados y los más virtuosos. Pero lo que vemos cada día es lo contrario."
GOZO: "Tengo libros que son de gran ayuda para el estudio"
RAZÓN: "Asegúrate de que no sean impedimentos. Igual que un número excesivo de soldados impidió a algunos la victoria, así los demasiados libros fueron para muchos un estorbo en su aprendizaje. Es frecuente que de la abundancia nazca la escasez. Si de todos modos consigues muchos libros, no deben ser menospreciados: guárdalos, usa los mejores y ten a mano los que con el tiempo te pueden aprovechar, evitando que te perjudiquen si no es el mejor momento para leerlos."
GOZO: "Tengo muchos y muy diversos libros"
RAZÓN: "Los muchos caminos a menudo engañan al caminante, y el que iba seguro por un sendero, dudará ante un desvío, y mucho más si topa con tres o con cuatro. Del mismo modo, quien leyendo un solo libro puede hallar gran provecho, quizá revuelva muchos sin obtener ningún fruto. La diversidad estorba a los que estudian; a los que ya saben les basta con poco, y el exceso no es bueno ni para unos ni para otros. Verdad es que los hombros más recios soportan mejor la carga."
GOZO: "He reunido gran número de libros excelentes"
RAZÓN: "Que yo sepa, nadie alcanzó la excelencia por el número de sus libros. (...) No te precies de tenerlos, sino de entenderlos; no los guardes en tus anaqueles, sino en tu memoria; no en tu biblioteca, sino en tu entendimiento. De otro modo, nadie merecería más la fama que el librero que los vende o el armario que los contiene"
pp. 69-70
miércoles, 5 de abril de 2023
Fragmento de "Remedios para la vida" de Francesco Petrarca
"Y para aquella consolación que imaginas que puede venir de la poesía, bastará como respuesta lo que Horacio pregunta en apenas dos versos:
'¿Y crees que con estos versos podrás quitarte del corazón las espinas, las cuitas y los afanes?'
Hablando y cantando se alimenta y se aviva el amor, no se extingue ni se mitiga, de modo que los cantos y poemas que recuerdas no curan, sino que irritan tus heridas.
(...) Pero en definitiva, entre tantos remedios son muy pocos los que apruebo: cambiar de casa o de lugar, que, si beneficia al cuerpo, también puede beneficiar al alma enferma; evitar y rehuir con diligencia todo lo que te traiga a la memoria el rostro amado; ocupar y distraer el animo con otros pensamientos y desvelos que borren las huellas de la antigua enfermedad."
pp. 108-109
lunes, 3 de abril de 2023
Fragmento de "Sendino se muere" de Pablo D´ors
"Simplemente haciendo nuestro trabajo con responsabilidad y competencia, capacidad y competencia, la capacidad de alivio que tenemos los sanitarios es inmensa"
Es preciso recalcar que, al pensar siempre en su enfermedad como fuente de ayuda a los demás, Sendino rompió milagrosamente ese círculo egocéntrico que caracteriza a la mayor parte de los enfermos. Pensar en el otro cuando se está sufriendo no puede calificarse más que de heroico, a mi modo de ver.
Fragmento pp. 48-50
domingo, 12 de febrero de 2023
Fragmento de "El mundo en el que vivo" de Helen Keller
Algunas manos, cuando toman las nuestras, sonríen y no caben en sí de alegría. Palpitan y se dilatan llenas de vida. Personas desconocidas han tomado mi mano entre las suyas como si fuera la de una hermana que no habían visto en muchísimo tiempo.
(...) Estoy convencida de que no hay manos que puedan compararse con las del médico, por su destreza paciente, su dulzura compasiva y su magnífica certeza. No nos ha de extrañar pues, que Ruskin encuentre en los toques certeros del cirujano la perfección del control y la delicada precisión que el artista debiera emular. Si el médico es un gran hombre, los toques de sus manos sanarán también el alma de sus pacientes. Un amigo mío muy querido, que fue nuestro médico en la salud y en la enfermedad, tenía en las manos este toque mágico de bienestar. Su espíritu alegre y cordial hacía bien a sus pacientes, necesitaran o no medicinas.
Keller, Hellen, El mundo en el que vivo, Atalanta, 2012 España, pp. 26-27.